SANTA BARBARA – Ya sobre el final del campamento de entrenamientos, el enfasis de Luke Walton pasa por ir limando asperezas y hacer ajustes.
Si bien es verdad que cinco dias de practicas no alcanzan para instalar sistemas nuevos en ofensiva y defensiva – mucho menos con 20 jugadores presentes de los cuales muchos todavia ni han debutado con la camiseta purpura y dorada – el entrenador reconocio que la idea fue hacer poco, pero hacerlo bien.
El sabado se hizo hincapie en jugadas con balon detenido desde la linea de base, con el canon principal siendo el mismo de siempre: movimiento de pelota, y de cuerpos.
“El hombre abierto toma el tiro abierto” podra ser un cliche que han repetido desde D'Angelo Russell hasta Brandon Ingram, pero el concepto es sencillo. Por ende, repetirlo hasta el hartazgo no es para aburrir, sino para terminar de cimentarlo.
Walton quiere que sus jugadores sean capaces de detectar en vivo los distintos mecanismos, con sus segundas y terceras intenciones, de una ofensiva rival en la NBA.
“Es importante que veamos lo que este pasando y hagamos ajustes durante el partido”, explico. “Hay muchas capas en cada jugada, y creo que aprendimos varias de esas capas”.
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En general, los resultados han sido positivos. Walton dejo en claro que le molestan menos los errores que el panico que se genera tras ellos. Errar es humano, quedarse con los brazos cruzados o entrar en desesperacion es imperdonable.
“No hemos instalado mucho, y lo que estamos haciendo lo estamos haciendo bien, pero una vez cada tanto el espacio se rompe, y si alguien hace el corte incorrecto, todos paran para descifrar lo que tienen que hacer”, senalo. “La idea es que no hay cortes incorrectos. Tenemos una jugada que queremos ejecutar, pero si nos equivocamos, tenemos que seguir moviendonos, ir a poner una cortina para alguien mas, y seguir moviendo la bola”.
El esfuerzo y las ganas son innegables, y Walton lo reconoce tras cada practica.
“Ha sido una semana exitosa”, declaro el sabado.
“El nivel de competencia ha sido fenomenal. Siempre es una linea delgada, porque uno no quiere que sean muy agresivos, pero estan haciendo un gran trabajo de respetarse entre ellos, pero empujandose y luchando para conseguir minutos”.
Precisamente Julius Randle, quizas el mejor jugador del campamento, se hizo eco de la intencion de su entrenador.
“Estamos buscando la quimica en ambos lados de la cancha”, recalco. “Nos estamos enfocando en la atencion al detalle”.
El ala-pivot, quien ha sufrido algunos golpes en los ultimos dias pero que ha mostrado una impresionante muestra de velocidad, poder, y fineza, sabe que lo necesario para dar el proximo paso yace en la concentracion.
“Atencion al detalle en el costado defensivo”, repitio. “He estado trabajando en mi juego todo el ano asi que eso se va a dar solo, pero defensivamente, tengo que enfocarme en que gana y pierde partidos, y jugar duro”.
